LAGO ENOL Y ERCINA

El lago Enol es el mayor de los lagos que conforman los llamados “Lagos de Covadonga”, y es el primero que te encuentras al subir a 1070 metros de altitud. De color verde esmeralda, más oscuro en verano, en este punto existió un glaciar hace millones de años. La desglaciación lo convirtió en el lago que conocemos hoy día. El lago Ercina se encuentra a pocos metros de distancia del lago Enol, pero no se parecen en nada. Este es un lago más pequeño y de menos profundidad.

La leyenda del lago Enol 

Cuentan que en tiempos remotos, cuando en tierras Asturianas vivían los celtas, en este punto donde hoy está el lago existía un campo de pasto de ganado, rodeado de las cabañas de los pastores.

Una noche de tormenta y frío una hermosa dama llegó al poblado pidiendo alojamiento, todos le negaron ayuda, la dama lloraba de cansancio hasta que llegó a la puerta de  una familia que de buen agrado la acogió durante la noche. La hermosa dama les advirtió que recogiesen a su ganado, ya que al día siguiente el pastizal donde había derramado sus lágrimas sería un enorme lago y así fué. El pueblo entero perdió sus animales, a excepción de la humilde familia.

En aquel entonces se consideró que la dama era la diosa céltica Deva, madre tierra. Con la llegada del cristianismo esta figura se le atribuyó a la virgen María. Actualmente en el interior del lago hay sumergida una talla de la virgen de Covadonga y desde los años setenta se saca en procesión cada 8 de Septiembre, día de Asturias.